Porciones / número de personas: 2 personas
Tiempo de Preparación: 780 minutos
Tiempo de cocción: 12 minutos
Categoría: Huevos y Lácteos
Dificultad: Fácil
250 ml. de leche entera
1 cucharadita de azúcar o miel, opcionalmente
1 cucharada sopera de yogur natural
Unas cuantas fresas
Para hacer un riquísimo yogur casero echamos la leche en una cacerola, a fuego medio. Lo ideal es mantenerla durante unos 10 minutos cerca de que rompa a hervir, pero sin que llegue a hacerlo, porque si no el yogur no sabría igual.
Transcurrido este tiempo, apartamos la leche del fuego. Si queremos que el sabor del yogur no tenga esa leve acidez característica podemos añadirle una cucharada de azúcar o de miel antes de apartar la leche del fuego. En cualquier caso, una vez hayamos apartado la leche del fuego la echamos en un termo que debe estar abierto.
Dejamos que la leche se enfríe durante unos treinta minutos aproximadamente. Después, le echamos una cucharada sopera de yogur natural y removemos para que se mezcle bien con la leche. A continuación ponemos la tapa al termo y dejamos que se haga el yogur durante cuatro horas.
Transcurrido este tiempo abrimos el termo y, con la ayuda de un colador, eliminamos el suero y removemos ligeramente para que quede con mejor aspecto. Después ponemos el yogur en recipientes con tapa o vasos de cerámica que taparemos con film o aluminio.
Dejamos al menos ocho horas en el frigorífico y cuando vayamos a servirlo, lavamos unas fresas, las quitamos el rabito, las partimos en trozos y las añadimos al yogur. ¡Exquisito!
Introducción de la receta