Porciones / número de personas: 6 personas
Tiempo de Preparación: 240 minutos
Tiempo de cocción: 20 minutos
Categoría: Postres
12 gr. de galletas tipo Digestive
Una cucharada de esencia de vainilla
75 gr. de mantequilla
500 ml. de nata para montar
Un kilo de fresas o fresones
Una tarrina de queso tipo Philadelphia
125 ml. de leche
5 hojas de gelatina
50 gr. de azúcar
Para disfrutar de una riquísima tarta de queso y fresas lo primero que debemos hacer es triturar las galletas metiéndolas en una bolsa para bocadillo y pasando el rodillo por encima.
Después las mezclamos con la esencia de vainilla y la mantequilla, previamente derretida en el microondas. Ponemos la masa resultante en la base y laterales de un molde desmontable y aplastamos ligeramente con los dedos. A continuación metemos el molde en el frigorífico media hora.
En una cacerola echamos la leche y el queso, y la colocamos a fuego medio. Mientras se calienta, ponemos la gelatina a remojo en agua fría durante 4 minutos y cuando esté hidratada escurrimos bien y la echamos a la cacerola. Mezclamos bien y reservamos.
Aparte, montamos la nata con el azúcar y después la mezclamos con el queso derretido. Removemos con movimientos envolventes para que no se baje.
Cortamos los fresones en láminas para adornar la tarta. Después, vertemos la mezcla del queso sobre la galleta machacada y adornamos con las fresas. Si queremos, podemos poner algunas fresas en el interior de la tarta, creando capas con el queso.
Tras terminar de decorar la superficie de la tarta la metemos en el frigorífico durante al menos tres horas para que se termine de solidificar. Una vez transcurrido este tiempo desmoldamos y servimos. ¡Deliciosa!
Introducción de la receta
La tarta de queso y fresas está deliciosa. Es una tarta que te resultará muy fácil de hacer, aunque no tengas mucha experiencia en repostería. Su otra gran ventaja, aparte de su exquisito sabor, es que siempre sale bien. ¿Por qué no te animas y sorprendes a tu familia?
