Porciones / número de personas: 4 personas
Tiempo de Preparación: 40 minutos
Tiempo de cocción: 30 minutos
Categoría: Postres
Dificultad: Fácil
300 gr. de harina
3 huevos
1 sobre de levadura
130 gr. de azúcar
Una pizca de sal
100 gr. de mantequilla
100 gr. de cacao
250 ml. de leche
Ni sé el tiempo que hace que no compro una tarta cuando llega el cumpleaños de algún miembro de la familia. Mi marido las prefiere más elaboradas, pero los niños casi siempre me piden la misma: la de chocolate.
A veces, incluso la hago por el simple placer de tener un desayuno o una merienda casera. Es una receta que queda espectacular y lo bueno de ella es que ni me complica la vida en la cocina, ni utiliza ingredientes raros, ni me lleva mucho tiempo. Así que, todo ello, unido a su riquísimo sabor, hace que se haya convertido en una de mis favoritas.
Lo primero que debemos hacer es poner el horno a precalentar a 180º C, con calor por arriba y por debajo.
Mientras se calienta cogemos un bol grande y vamos echando todos los ingredientes, para hacer la masa. Empezaremos por la harina, y a continuación vamos echando los huevos, uno a uno.
Sin dejar de batir incorporaremos la mantequilla, a temperatura ambiente o ya derretida, y por último la leche, el cacao, la levadura y, para terminar, un pellizquito de sal.
Mezclamos bien y cuando hayamos obtenido una mezcla homogénea la echamos a un molde redondo de silicona. Metemos al horno y dejamos que se haga durante, aproximadamente, media hora.
Cuando veamos que la tarta está lista la sacamos y la dejamos enfriar antes de desmoldar.
La tarta se puede adornar, si somos aún más golosos, con un poco de chocolate derretido haciendo una capa o bien en su superficie, así como con virutas de chocolate o alguna fruta roja para dar color, como las fresas. ¡Para chuparse los dedos!
Introducción de la receta
