Porciones / número de personas: 6 personas
Tiempo de Preparación: 65 minutos
Tiempo de cocción: 25 minutos
Categoría: Cocina internacional
400 gr. de harina de fuerza
Un sobre de levadura seca de panadería
150 ml. de leche
Una cucharada de sal
3 yemas de huevo
50 gr. de mantequilla
200 gr. de carne picada
Queso mozzarella
2 cucharadas de tomate triturado
Chile en polvo
Un cuarto de cebolla
Jalapeños
Medio pimiento rojo
Pimienta
Una pizca de aceite de oliva
Para hacer una riquísima pizza mexicana con carne, chile y cebolla, lo primero que haremos será la base de la pizza. Para ello, mezclamos la harina, la levadura, la leche, la sal, las yemas de huevo y la mantequilla en un bol lo suficientemente grande. Después sobre una superficie ligeramente enharinada vamos amasando hasta conseguir una masa homogénea.
Hacemos una bola con la masa, la envolvemos en film y la dejamos media hora en el frigorífico. Transcurrido este tiempo la estiramos con la ayuda de un rodillo, y la colocamos sobre una bandeja de horno forrada con papel de horno.
Echamos un poco de aceite de oliva en una sartén y la ponemos a fuego medio. Cuando esté caliente echamos la carne. La salpimentamos e incorporamos el chili en polvo. A continuación añadimos el pimiento y la cebolla picada. Removemos hasta que la carne esté ligeramente dorada y las verduras un poco blandas.
Ponemos a precalentar el horno a 220º C., con calor por arriba y por abajo. Mientras se calienta extendemos el tomate triturado sobre la base de la pizza, echamos las verduras y la carne sobre la superficie, ponemos un poco de queso mozzarella bien repartido por la pizza y la horneamos durante un cuarto de hora aproximadamente.
Después la sacamos del horno, ponemos por encima unas cuantas rodajas de jalapeños, según nuestro gusto, y servimos inmediatamente. ¡Deliciosa!
Introducción de la receta
La pizza mexicana con carne, chile y cebolla está deliciosa. Es un plato que puedes hacerlo más o menos picante, a tu gusto, y que tiene la ventaja de que es sabrosa, nutritiva y natural, además de estar riquísima. Si quieres sorprender a familia o amigos, es lo que necesitas.