Porciones / número de personas: 4 personas
Tiempo de Preparación: 120 minutos
Tiempo de cocción: 15 minutos
Categoría: Panes y bollos
Dificultad: Fácil
250 gr. de harina de fuerza
5 gr. de sal
125 ml. de agua caliente
15 ml. de aceite de oliva
7 gr. de levadura de panadería
300 gr. de tomate triturado
30 gr. de rulo de cabra
100 gr. de mozarella
50 gr. de queso gouda
30 gr. de queso azul
Para realizar una exquisita pizza cuatro quesos, lo primero que debemos hacer es la masa. Para ello echamos en un bol lo suficientemente amplio la harina, la sal, el agua caliente, el aceite de oliva y la levadura de panadería. Removemos bien y, cuando los ingredientes estén bien integrados, amasamos con las manos.
Tapamos el bol con un paño limpio y seco y dejamos que la masa, hecha una bola, repose hasta que doble su tamaño. Mientras, ponemos a escurrir el tomate triturado natural para que nos quede lo más seco imposible.
Transcurrido el tiempo de reposo de la pizza sacamos la masa del bol y la trabajamos con las manos sobre una superficie ligeramente enharinada, para terminar dándola forma con la ayuda de un rodillo.
Echamos el tomate triturado sobre la pizza, con cuidado de no poner mucha cantidad y sobre él incorporamos el queso mozzarella. Después, vamos colocando el resto del queso, cortado en trozos pequeños, sobre el queso mozzarella, de manera que los quesos no formen capas, sino que queden bien repartidos sobre toda la superficie de la pizza.
Ponemos a precalentar el horno a 210º C, con calor por arriba y por abajo. Cuando esté caliente metemos la pizza, que habremos colocado en una bandeja de horno forrada previamente con papel de horno.
Dejamos que la pizza se haga durante un cuarto de hora aproximadamente y, cuando veamos que está hecha y el queso fundido, retiramos del horno y servimos antes de que se enfríe. ¡Deliciosa!
Introducción de la receta
