Porciones / número de personas: 10 porciones
Tiempo de Preparación: 20 minutos
Tiempo de cocción: 30 minutos
Categoría: Postres
Para la masa:
5 huevos
580 gr de azúcar mascabo (o azúcar moreno)
240 gr de miel
370 ml de aceite de girasol (o de maíz)
1 cucharadita de esencia de vainilla
490 gr de harina de trigo
50 gr de polvo de hornear
1 cucharadita de canela
1 pizca de sal
700 gr de zanahorias ralladas
250 gr de nueces picadas
250 gr de piña picada
Para el armado:
Frosting de queso crema firme (cantidad necesaria)
Azúcar impalpable (opcional, para decorar)
Chocolate blanco (opcional, para decorar)
El pastel de zanahoria y piña es una combinación que sorprende, pero cuando descrubas lo jugoso que está aunque pasen los días seguro que apuntas la receta para hacerla muy a menudo. Yo lo hago mucho para cumpleaños y reuniones familiares.
Esta receta la hacemos con una batidora de globo, si no la tienes no pasa nada, puedes usar unas varillas y, aunque dará más trabajo, te saldrá igualmente rico.
En el bol de una batidora con globo, bate a máxima velocidad los huevos, el azúcar mascabo y la miel hasta integrar completamente. Agrega, en forma de hilo, el aceite y la esencia de vainilla mientras continúas batiendo.
Cambia el batidor globo por el batidor lira. Tamiza la harina, el polvo de hornear, la canela y la sal. Incorpóralos al batido, mezclando con la lira hasta que se integren. Añade la zanahoria rallada, las nueces picadas y el ananá (piña) picada. Mezcla hasta que todos los ingredientes estén bien distribuidos.
Divide la preparación en 3 moldes circulares con papel aluminio enmantecado en la base y papel manteca engrasado en los laterales interiores. Llena los moldes hasta la mitad. Lleva al horno precalentado a 170°C y hornea por aproximadamente 45 minutos o hasta que un palillo salga limpio al insertarlo en el centro.
Coloca una base de bizcocho sobre una superficie plana. Con una manga pastelera, cubre la superficie de manera concéntrica con frosting de queso crema firme.
Coloca otro disco de bizcocho sobre la capa de frosting y repite el proceso. Termina con el último disco de bizcocho y cúbrelo con frosting de la misma manera.
Cubre los laterales del pastel con una capa de frosting y alisa tanto la parte superior como los laterales con una espátula.
Esparce pequeñas porciones de frosting teñido de naranja en los laterales y alisa con una espátula para crear un efecto de color.
Decora la parte superior del pastel con frosting en manga con pico rizado y colorante naranja. Termina con un macarrón o la decoración que prefieras.
Este pastel mejora en sabor y textura si lo dejas reposar en la nevera durante 24 horas antes de servir. Puedes personalizar la decoración con frutas frescas, trocitos de piña caramelizada o chocolate rallado.
¡Disfruta de este exquisito pastel de zanahoria y piña, ideal para ocasiones especiales o como un capricho dulce en cualquier momento!
