Porciones / número de personas: 6 personas
Tiempo de Preparación: 180 minutos
Tiempo de cocción: 30 minutos
Categoría: Postres
Dificultad: Moderado
1 masa de hojaldre
500 gr. de nueces peladas
410 gr. de azúcar
8 huevos
125 gr. de mantequilla
500 gr. de mascarpone
Media copita de coñac, opcional
Una pizca de sal
Para realizar un riquísimo pastel de nueces con salsa de mascarpone, lo primero que debemos hacer es poner a precalentar el horno a 220º C, con calor por arriba y por abajo. A continuación extendemos la masa de hojaldre o masa quebrada y la colocamos sobre el molde que vayamos a utilizar, cortando los bordes sobrantes y pinchándola con un tenedor. Después, colocamos sobre ella unos garbanzos que pesen, para que la masa no sube.
Metemos la masa en el horno durante 10 minutos, hasta que se dore. Entonces sacamos y reservamos.
A continuación, preparamos el relleno. Para ello batimos cuatro huevos con 250 gr. azúcar y, cuando tengamos una mezcla espumosa, incorporamos la mantequilla, previamente fundida en el microondas. Removemos bien hasta conseguir una mezcla homogénea.
A continuación le añadimos las nueces peladas y molidas y, opcionalmente, el coñac. Echamos esta masa sobre el hojaldre y volvemos a meter al horno. Dejamos que se haga durante unos veinte minutos y después sacamos y dejamos enfriar.
Por último, realizamos la salsa de mascarpone. Para ello cogemos cuatro huevos y separamos las claras de las yemas. Ponemos las yemas en un cuenco con 80 gr. de azúcar y las batimos con unas varillas, hasta que tripliquen su volumen. Reservamos.
Aparte, añadimos una pizca de sal a las cuatro claras y las montamos con unas varillas eléctricas. Cuando estén casi montadas le añadimos el resto del azúcar y continuamos batiendo hasta que las veamos bien firmes. Reservamos.
Cogemos el recipiente donde tenemos las yemas con el azúcar y le añadimos el mascarpone a temperatura ambiente. Mezclamos bien hasta obtener una crema fina. Después incorporamos las claras montadas pero muy suavemente. Removemos con movimientos envolventes. Dejamos reposar el conjunto en el frigorífico y cuando haya llegado el momento de servir el pastel, lo vertemos por encima de éste. ¡Exquisito!
Introducción de la receta