Porciones / número de personas: 5 personas
Tiempo de Preparación: 240 minutos
Tiempo de cocción: 20 minutos
Categoría: Panes y bollos
200 gr. de harina de fuerza
7 gr. de levadura seca de panadería
300 gr. de harina de trigo
10 gr. de azúcar
10 gr. de sal
350 gr. de agua
Aceite de oliva virgen extra
Hierbas provenzales
Sal gruesa
Para disfrutar de un riquísimo pan focaccia, lo primero que debemos hacer es echar en un bol la sal y las harinas.
Formamos un hueco y echamos el agua con la levadura y el azúcar, y mezclamos hasta que todos los ingredientes estén bien integrados. Tapamos con un paño y esperamos 15 minutos.
Una vez transcurrido este tiempo comenzamos a amasar durante unos 10 minutos. Después, ponemos la masa en la encimera, ligeramente engrasada y seguimos amasando con las manos ligeramente humedecidas o untadas con aceite.
Cuando la masa esté elástica la echamos en un bol ligeramente engrasado y la tapamos con un paño húmedo o film. Dejamos que leve hasta doblar su tamaño, durante aproximadamente una hora.
Engrasamos una bandeja de horno y echamos la masa sobre ella, extendiéndola ligeramente sin aplastarla, con las manos engrasadas.
Pincelamos con aceite y dejamos que leve durante unos 30 minutos. Después, calentamos el horno a 240º C y volvemos a extender ligeramente la masa, sin que llegue a los bordes.
Volvemos a pincelar con aceite y hacemos unos huecos introduciendo los dedos. Pincelamos de nuevo y dejamos reposar 10 minutos.
Finalmente, echamos un poco de aceite y sal gruesa, e introducimos la bandeja en el horno. Horneamos 5 minutos y después 15 minutos más a 220º C.
Nada más salir del horno regamos con aceite, esperamos cinco minutos, desmoldamos y dejamos enfriar sobre una rejilla. ¡Delicioso!
Introducción de la receta
El pan focaccia está delicioso. Si se sabe hacer, este pan queda tierno y crujiente a la vez, con una miga llena de ojos de aire que es su rasgo característico. Es mucho más fácil de hacer de lo que parece, y está más rico de lo que imaginas.