Porciones / número de personas: 6 personas
Tiempo de Preparación: 180 minutos
Tiempo de cocción: 10 minutos
Categoría: Cocina internacional
Dificultad: Fácil
125 gr. de leche entera
Crema pastelera para rellenar
15 gr. de levadura fresca
100 gr. de azúcar
Aceite de oliva virgen extra
35 gr. de mantequilla
Una pizca de sal
300 gr. de harina de fuerza
1 huevo
Para hacer unos riquísimos Krapfen, los bollitos austríacos, lo primero que debemos hacer es poner la leche en un cazo, a fuego medio. Cuando esté templada retiramos del fuego y deshacemos la levadura en ella.
A continuación añadimos la mantequilla, el huevo, y 60 gr. de azúcar. Mezclamos bien hasta integrar todos los ingredientes. Después agregamos una mezcla de harina y sal, y vamos amasando con las manos hasta que consigamos una masa lisa y elástica, con una textura ligeramente pegajosa. Entonces la tapamos con un paño limpio y seco, y dejamos que repose una hora.
Transcurrido este tiempo, volvemos a amasar brevemente y dejamos reposar otros cinco minutos. A continuación la estiramos con un rodillo hasta conseguir una plancha de unos dos centímetros de espesor.
Con la ayuda de un cortador redondo vamos cortando trozos de masa de aproximadamente seis centímetros de diámetro. Los vamos colocando sobre una bandeja de horno forrada con papel de horno. Una vez colocadas todas las porciones de masa las dejamos tapadas con un paño durante, al menos, una hora más.
Pasado este tiempo ponemos en una sartén abundante aceite de oliva, a fuego medio. Cuando el aceite esté caliente, pero no en su punto más álgido, vamos friendo las porciones de masa, procurando que se hagan bien, pero no se quemen. Después las vamos sacando a una bandeja forrada con papel absorbente, y posteriormente las rebozamos con azúcar. Dejamos enfriar.
Cuando los krapfen estén fríos, es tiempo de rellenarnos con la crema pastelera. Para ello nos ayudaremos de una manga de boca larga. Opcionalmente, a la hora de servir podemos poner un poco de crema pastelera por encima a modo de adorno.
Si queremos hacer la crema pastelera de forma casera, sólo tenemos que mezclar tres yemas de huevo, medio litro de leche entera, 40 gramos de maizena, 100 gramos de azúcar glass, una cucharada de esencia de vainilla y otra de leche condensada, y ponerla seis minutos al microondas, sacando y removiendo cada dos minutos. Tras rellenar los krapfen sólo nos queda degustarlos. ¡Deliciosos!
Introducción de la receta