Porciones / número de personas: 10 personas
Tiempo de Preparación: 70 minutos
Tiempo de cocción: 20 minutos
Categoría: Panes y bollos
2 cucharaditas de levadura seca
Semillas de sésamo
275 ml. de agua
Un huevo
Una cucharadita de extracto de malta
2 cucharadas de sémola
500 gr. de harina de fuerza
2 cucharaditas de sal
3 cucharadas de aceite de oliva
Para disfrutar de unos ricos grissini o bastones de pan mezclamos la levadura con el agua y dejamos cinco minutos. Después añadimos el extracto de malta y removemos bien.
Aparte, mezclamos la harina y la sal en un recipiente lo suficientemente grande. Hacemos un agujero en el centro y vertemos en él el aceite de oliva y el agua con la levadura, pero poco a poco, según lo vayamos necesitando mientras vamos removiendo hasta obtener una masa elástica. Tapamos con un paño de cocina y lo dejamos en reposo diez minutos.
Transcurrido este tiempo amasamos de nuevo y después formamos con la masa un rectángulo de unos 30x20 centímetros y 1,5 centímetros de grosor. Tapamos con un paño y dejamos reposar durante otros diez minutos.
Mientras tanto echamos en una bandeja de horno un poco de aceite y lo extendemos por su superficie. Después, esparcimos la sémola sobre ella. A continuación cortamos el rectángulo en tiras y las estiramos hasta que midan unos 25 centímetros de largo. Posteriormente colocamos las tiras en la bandeja de horno con una mínima separación entre ellas.
Preparamos un glaseado con una yema de huevo batida a la que iremos añadiendo una cucharada de agua sin dejar de batir. Después, pintamos las tiras con la ayuda de una brocha de cocina. A continuación echamos sobre las tiras las semillas de sésamo.
Precalentamos el horno a 200º C., con calor por arriba y por abajo. Cuando esté caliente metemos la bandeja y horneamos durante unos 20 minutos. Transcurrido este tiempo sacamos los grissini del horno y los dejamos enfriar sobre una rejilla. ¡Deliciosos!
Introducción de la receta
Los grissini o bastones de pan italianos, están deliciosos. Sirven para acompañar cualquier comida, pero están tan ricos que lo cierto es que apetecen a todas horas y por ello incluso se pueden tomar como aperitivo. No te resultarán difíciles de hacer. El resultado merece la pena. ¡Compruébalo!