Porciones / número de personas: 8 personas
Tiempo de Preparación: 65 minutos
Tiempo de cocción: 40 minutos
Categoría: Postres
125 gr. de leche entera
4 huevos
125 gr. de agua
140 gr. de harina de repostería
Una pizca de sal
125 gr. de mantequilla
Azúcar glas
700 gr. de nata para montar
Unas 60 fresas pequeñas
Para hacer un riquísimo eclair relleno de fresas con nata lo primero que debemos hacer es poner en una cacerola la leche junto con el agua, la mantequilla y la sal, a fuego medio, hasta que hierva.
Mientras tanto, tamizamos la harina en un plato y, aparte, batimos ligeramente los huevos, y reservamos ambos.
Cuando hierva lo que tenemos en la cacerola retiramos del fuego y echamos la harina de golpe. Damos vueltas hasta que todos los ingredientes estén bien mezclados y entonces lo ponemos de nuevo a fuego medio, sin parar de remover, hasta que veamos que se está formando una pequeña costra en el fondo de la cacerola. Entonces apartamos del fuego y echamos la masa en un bol y dejamos reposar cinco minutos.
Cuando ha transcurrido este tiempo vamos echando los huevos batidos pero poco a poco, y removiendo para que se integren bien. Después, dejamos reposar la masa, tapada con un film, hasta que se enfríe un poco.
Ponemos a precalentar el horno a 180º C., con calor por arriba y por abajo. Cogemos una manga pastelera y la llenamos con la masa. Después, con la ayuda de una boquilla rizada, vamos depositando pequeñas porciones de masa sobre una bandeja de horno forrada con papel de horno.
Horneamos a 180º C durante un cuarto de hora y luego a 160º C durante otro cuarto de hora. Después sacamos y dejamos enfriar los eclairs sobre una rejilla.
Mientras se enfrían vamos montando la nata. Cuando esté casi montada añadimos tres cucharadas de azúcar glas y terminamos de montar.
Aparte, lavamos las fresas, las quitamos las partes verdes y las secamos. Cuando los eclairs estén fríos los abrimos por la mitad con un cuchillo de sierra. Ponemos la nata montada en la mitad de abajo con la ayuda de una manga pastelera y después vamos colocando las fresas, cortadas en trozos, y añadiendo más nata montada.
Por último, cerramos con el otro trozo de eclair y espolvoreamos azúcar glas por encima. ¡Exquisito!
Introducción de la receta
El eclair relleno de fresas con nata está delicioso. Es muy suave y tiene un sabor exquisito, además de ser visualmente muy atractivo, lo que le convierte en un postre perfecto para hacer cuando tenemos invitados en casa. Además, cuenta con la ventaja de que gusta a niños y mayores.