Porciones / número de personas: 3 personas
Tiempo de Preparación: 40 minutos
Tiempo de cocción: 20 minutos
Categoría: Postres
1 coco
Si te preguntas cómo rallar coco, lo primero que debes hacer es elegir un coco fresco, que no tenga moho ni golpes en la cáscara. Comprueba que, al moverlo, se oye el líquido en su interior.
A continuación retiramos el pelo de color marrón de la cáscara con los dedos. De esta manera te resultará más fácil encontrar lo que se conoce como “ojos del coco”, que son dos pequeñas hendiduras situadas una junta otra, que vienen acompañadas de otra más en la parte inferior.
Con una broca perforamos el “ojo” que se encuentra solo. Solo tenemos que apretar y girar la boca hasta que notemos que ha alcanzado el interior del coco. Entonces vertemos el líquido en un bol tan solo inclinando el coco.
A continuación, para facilitar el proceso, calentamos el coco en el horno, previamente precalentado a 200º C., durante 20 minutos. Transcurrido este tiempo retiramos el coco y dejamos enfriar. Después envolvemos el coco en una toalla o paño de cocina, lo situamos en una encimera y con un martillo lo golpeamos hasta que se rompa.
Con la ayuda de un pelador de verduras retiramos los restos de la piel de coco y a continuación lavamos la pulpa, y dejamos que se seque. Una vez seco utilizamos un rallador de queso para rallarlo.
El coco rallado lo guardaremos en un bol y meteremos este en el congelador para que se endurezca. ¡Delicioso!
Introducción de la receta
Si te estás preguntando cómo rallar coco, no te preocupes, porque es un proceso muy fácil. El coco se utiliza en numerosas recetas de cocina, especialmente postres, pero muchas personas no compran coco fresco porque no saben cómo quitar la cáscara y sacar la pulpa. Sin embargo, ¡es muy sencillo!