Porciones / número de personas: 1 persona
Tiempo de Preparación: 2 minutos
Categoría: Verduras y legumbres
Dificultad: Fácil
1 cebolla
1 tabla de cortar
1 cuchillo grande y afilado
Cómo picar cebolla sin llorar es muy fácil. Lo importante es la técnica con la que cortemos la cebolla y mantenernos algo separados del cuchillo, que debe estar bien afilado y ser de un tamaño más bien grande. También es importante que en la cocina no haya corrientes de aire en ese momento para salvarnos de los efluvios de la cebolla.
Cuando vayamos a cortar la cebolla, la depositamos sobre una tabla de cortar, y adelantamos esta hacia adelante todo lo que podamos, de manera que los brazos estén estirados. Después, partimos la cebolla por la mitad y a continuación la pelamos y la pasamos por agua fría.
Ponemos una de las mitades cortadas con la parte plana pegada a la tabla y comenzamos a cortar de forma rápida y con precisión. De esta manera el tiempo en que la cebolla suelta sus emisiones son más cortos, y como el cuchillo es grande y está afilado la pulpa se corta y no se machaca. Repetimos el proceso con la otra parte de la cebolla que aún está entera.
Si a ello le unimos la potencia de la campana extractora de humos, el resultado es perfecto, pues los efluvios suelen ir hacia arriba y son recogidos por la campana. Hay personas que también mojan la cebolla y el cuchillo en agua en varios momentos del corte, para frenar el proceso que nos irrita los ojos. ¡Sencillísimo!
Introducción de la receta