Porciones / número de personas: 6 personas
Tiempo de Preparación: 35 minutos
Tiempo de cocción: 30 minutos
Categoría: Cocina internacional
Queso mozzarella o burrata
Salsa carbonara
Cómo hacer una pizza extra cremosa es muy fácil. El primer secreto para conseguirlo es el queso. Hay que ponerlo en abundancia para conseguir que sea una pizza cremosa. Sin embargo, si la mozzarella es fresca hay que secarla bien, lo que se puede hacer fácilmente si la secas apretándola fuertemente con un trapo.
A continuación la cortamos y la extendemos encima del tomate. Si es una mozzarella o burrata muy buena, también podremos echarla justo antes de servir, una vez la pizza esté horneada.
Otra opción para hacer una pizza muy cremosa es utilizar salsa carbonara, que se prepara igual que para los platos de pasta. Con esta salsa y queso, la pizza quedará tan cremosa que te resultará difícil comerla sin cuchillo y tenedor.
Por último, el calor es un elemento clave para lograr una pizza jugosa y cremosa. Todas las pizzas deben ser horneadas a más de 200º C., con calor por arriba y por abajo. En contra de la opinión generalizada, cuanto más fina sea la masa, mayor deberá ser la temperatura y al revés.
Los mejores hornos son, por supuesto, los de barro y leña, que permiten que la masa quede crujiente por fuera y tierna por dentro. Pero si utilizamos un horno convencional, el secreto está en calentarlo previamente a temperatura máxima antes de introducir la pizza.
Introducción de la receta
Cómo hacer una pizza casera extra cremosa es muy fácil. Con estos pequeños trucos conseguirás que la pizza pase de estar rica a ser la mejor pizza que has comido en tu vida. A los niños y a los mayores les gusta así, cuanto más cremosa mejor. ¡Toma nota!