Porciones / número de personas: 6 personas
Tiempo de Preparación: 60 minutos
Tiempo de cocción: 40 minutos
Categoría: Postres
6 huevos
1 sobre de levadura
4 medidas de yogur de azúcar
6 medidas de yogur de harina
2 yogures de limón
Canela en polvo, opcional
2 medidas de yogur de aceite
Ralladura de un limón
Sal
Cómo hacer un bizcocho muy esponjoso es fácil. Lo primero que hay que hacer es tener pesados correctamente todos los ingredientes que vamos a utilizar. Además, los ingredientes deben estar a temperatura ambiente, por lo que los sacaremos del frigorífico un rato antes de comenzar la elaboración del postre.
En primer lugar procederemos a batir los huevos con el azúcar en un bol. Si lo hacemos cerca de una fuente de calor o incluso en un bol dentro de una cacerola con agua caliente, el proceso se acelera y nos ofrecerá un mejor resultado. Dejaremos de batir cuando la mezcla haya triplicado su volumen y se haya vuelto blanquecina.
A continuación añadimos el resto de ingredientes al bol y mezclamos bien. Los últimos ingredientes que incorporemos deben ser una mezcla de harina con levadura y una pizca de sal, que iremos incorporando de manera tamizada y poco a poco para que quede un bizcocho muy esponjoso.
Lo mejor es utilizar una harina de trigo común y la levadura aparte, y remover con suavidad, de abajo a arriba y lo menos posible, evitando los grumos. No incorporaremos más harina hasta que no se haya integrado la que hemos echado anteriormente.
El molde a utilizar para calentar el bizcocho en el horno, si no es de silicona, debe ir untado con mantequilla. Para ello podemos utilizar una brocha de cocina. A continuación espolvoreamos un poco de harina y retiramos el exceso poniendo el molde boca abajo y golpeándolo con suavidad.
Es importante también que pongamos el horno a precalentar a 200º C., con calor por arriba y por abajo. Cuando el horno esté caliente bajamos la temperatura a 180º C., y después metemos el molde, una vez que hayamos introducido en él los ingredientes. Si utilizamos para ello una manga pastelera conseguiremos que la masa quede bien repartida por toda la superficie.
A continuación,, dejamos que el bizcocho se haga durante unos 40 minutos. Si es posible, lo colocaremos en el centro de horno y mejor sobre una bandeja que sobre una rejilla.
Es importante no abrir la puerta del horno durante el proceso de horneado, al menos durante las dos primeras terceras partes del tiempo de cocción. Cuando veamos que el bizcocho está hecho apagamos el horno y abrimos la puerta unos centímetros para que entre un poco de aire frío y el bizcocho se vaya enfriando lentamente, sin desinflarse.
Dejamos que transcurran diez minutos antes de sacarlo del horno, y dejarlo enfriar totalmente sobre una rejilla. Si cuando aún esté caliente lo metemos dentro de una bolsa de plástico cerrada y dejamos que se termine de enfriar en su interior conseguiremos que esté, además de tierno, muy jugoso.
Una vez se haya enfriado, procederemos al desmoldado del bizcocho. Si queremos conservarlo esponjoso y tierno durante mucho tiempo, podemos conservarlo dentro de un recipiente hermético, una vez se haya enfriado totalmente. ¡Delicioso!
Introducción de la receta
Cómo hacer un bizcocho muy esponjoso es muy fácil. Existen diferentes trucos para lograrlo. El resultado es un bizcocho muy tierno, con un aspecto exquisito, de esos que comienzas a disfrutarlos incluso antes de haberlos probado. Son trucos muy sencillos, así que, ¿por qué no ponerlos en práctica?