Porciones / número de personas: 1 personas
Tiempo de Preparación: 10 minutos
Tiempo de cocción: 5 minutos
Categoría: Postres
Miel
Cómo ablandar la miel que tenemos cristalizada es bastante fácil. Existen varias formas de hacerlo, y todas ellas muy sencillas.
La primera fórmula que podemos utilizar es encender el horno y después apagarlo. Cuando comprobemos que el horno está tibio podemos meter el frasco sin tapa para que se vaya calentando lentamente. En poco tiempo la miel estará líquida y podremos utilizarla o consumirla sin mayores dificultades.
Otra opción es colocar en el frasco en un recipiente con agua y poner este recipiente a fuego suave, para que vaya cogiendo temperatura muy despacio. Enseguida la miel estará líquida. Solo debemos tener la precaución de dejar enfriar el frasco antes de manipularlo.
También podemos utilizar un microondas. Para ello debemos tener la miel en un frasco de vidrio, que introduciremos en el microondas. Iremos calentando la miel de 30 en 30 segundos utilizando la función del descongelado. Si vemos que se ha comenzado a licuar, bastará con que la removamos para que termine de hacerlo.
En los casos que utilizamos calor debemos tener cuidado de no calentar la miel por encima de 60 grados centígrados, para que no se vean alterados el sabor y las propiedades de la miel.
Por último, un truco tradicional es meter una zanahoria bien lavada, pero con piel, en el bote de la miel. Lo dejaremos unas doce horas y la miel se ablandará. En cualquier caso, la miel conviene guardarla a temperatura ambiente. Nunca hay que agregar agua.
Introducción de la receta
La miel es un alimento riquísimo, sano y muy completo, pero a veces comprobamos que la que tenemos guardada en el fresco se nos ha cristalizado, por lo que nos resulta difícil utilizarla en la receta que habíamos pensado. Existen varias fórmulas para ablandarla sin que pierda ninguna propiedad.