Porciones / número de personas: 4 personas
Tiempo de Preparación: 150 minutos
Tiempo de cocción: 15 minutos
Categoría: Cocina internacional
Dificultad: Fácil
Aceite de oliva
Una pizca de sal
50 gr. de vino blanco o aguardiente
30 gr. de azúcar
80 gr. de agua
Semillas de sésamo
600 gr. de harina
Canela en rama
Una pizca de miel
Para hacer buñuelos fritos chinos lo primero que debemos hacer es poner en una cacerola el agua, la canela, el azúcar y una pizca de sal. La ponemos a fuego medio y dejamos que hierva y después apartamos y colamos. Reservamos.
Aparte, echamos en un recipiente 200 gr. de aceite, el vino o el aguardiente y el agua aromatizada anteriormente. Mezclamos todo muy bien y le vamos añadiendo la harina poco a poco, removiendo bien antes de seguir echando más cantidad. Amasamos con las manos hasta que observemos que la masa ya no se nos pega. Entonces tapamos el recipiente con un paño limpio y seco y dejamos reposar dos horas.
Transcurrido este tiempo, ponemos abundante aceite de oliva en una sartén lo suficientemente honda. Mientras se calienta, vamos dando forma a los buñuelos. Para ello echamos un poco de harina a la encimera y vamos cogiendo cada vez dos porciones de masa. Aplanamos ligeramente con un rodillo las dos porciones, que no deben ser muy largas, y después colocamos una de las porciones enrollando a la otra como si fuera un anillo. Si es necesario, retorcemos para que tomen la forma característica de estos buñuelos.
A continuación vamos friendo las porciones de masa, una vez que el aceite esté muy caliente. Es importante que queden doradas y se hagan bien por todos los lados. Una vez esté hecho el buñuelo lo sacamos con cuidado y lo depositamos sobre una bandeja forrada con papel de cocina, para que absorba el aceite sobrante.
Una vez fritos todos los buñuelos pintamos con poco de miel muy líquida y espolvoreamos algunas semillas de sésamo por encima. Dejamos enfriar y servimos. ¡Deliciosos!
Introducción de la receta